CESA: crónica de miles de buenas intenciones

Dentro de un par de meses se cumplirá un año desde que los alumnos nos unimos, hicimos un plantón, y logramos que se reestructure el CESA (ver aquí, aquí y aquí). Ahora, a pocas semanas de empezar las clases, queremos analizar la labor de este Comité y preguntarnos qué es lo que ha hecho para mejorar el servicio de las cafeterías... Parece que todos concordamos con la respuesta: muy poco o casi nada.

Empecemos pues con la crónica de las miles de buenas intenciones que tiene el CESA y de las pocas labores que han realizado:

Los miembros del CESA fueron nombrados en Mayo del 2008 (ver aquí), sin embargo la primera sesión no se llevó a cabo hasta un mes después y gracias a la insistencia de nuestra REA, Sara Carrillo, para que esto sucediera.

En septiembre, los miembros del CESA inspeccionaron cada cafetería para comprobar el estado de salubridad (ver aquí), además decidieron manifestar su intención de proponer que se haga un estudio técnico para corroborar la capacidad instalada de cada cocina, la demanda insatisfecha de platos de comida, etc.



Luego, en octubre se consiguió que se compre un horno microondas para cada comedor, algunos de estos fueron instalados en algún lugar recóndito de una o dos cafeterías, los otros hasta la fecha no se instalan. Adicionalmente se compraron varias mesas y sillas para cada comedor.
Por otro lado, el CESA manifestó su intención de aprobar el proyecto de la REA sobre la campaña de uso adecuado del cuaderno de ocurrencias.

En noviembre, ante la venta de los platos básicos a personas ajenas a la comunidad universitaria, los miembros del CESA tuvieron la intención de proponer a las cafeterías que se venda solo a las personas que muestren algún documento que acredite que eran miembros de la PUCP (ya sean profesores, alumnos, personal administrativo, de limpieza, etc.), sin embargo esto no se llegó a concretar. También se solicitó a un grupo de ingenieros industriales que elaboren un bosquejo del estudio técnico que se quería hacer desde septiembre.

En diciembre terminó el contrato con el concesionario de la cafeta de artes y se invitó a varias empresas a participar del proceso de licitación. La Administración de la Univ. aprobó el estudió. La presidenta del Comité se fue de vacaciones.

Para febrero el panorama no ha cambiado mucho: no se van a cocinar más platos de comida (es decir, el básico no pasará de 1:30, y ni qué decir del económico), no se ha trabajado para mejorar la calidad de la comida, no se ha avanzado en la licitación de la cafeta de arte (y ya empiezan clases en menos de un mes) los hornos siguen sin instalarse, recién la semana pasada ha empezado a ampliarse el comedor de arte, no se ha distribuido bien el espacio en el comedor de administrativas, las cajeras siguen negándole a entregar el cuaderno de ocurrencias, no se ha modificado ni siquiera el reglamento del CESA, la nutricionista sigue creyendo que hay básico hasta las 3 de la tarde y sigue igual de prepotente que siempre y, claro, no olvidemos: el CESA no hace nada "porque su presidenta sigue de vacaciones". ¡Ah! Tampoco olvidemos que ellos tenían todas las intenciones de mejorar todas estas cosas.

Esperamos, pues, que el CESA comience a trabajar a la brevedad posible para darle solución a estos problemas y que todas la buenas intenciones que manifiestan en todas la sesiones que han tenido se concreten por fin en acciones.